ARGENTINA | 03 de Mayo de 2024
Chubut tiene un gran problema estratégico, ha crecido alrededor de las industrias petroleras, cementeras y pesqueras, y hoy se encuentra en un laberinto con respecto a la minería, lo que conduce a la falta de una visión integral sobre el futuro de la provincia.
Por Genaro Pérez (*)
Desde mi posición como jefe comunal de Gastre, he sido testigo de la desilusión, la falta de progreso económico y la falta de oportunidades para nuestros ciudadanos. En un contexto de crisis tan importante, como el que estamos viviendo, nuestra provincia necesita más que nunca inversiones, actividad privada y empleo. Tuvimos una oportunidad, pero la falta de conocimiento y la política destructiva nos negaron el futuro. En particular, quiero hablar sobre la oportunidad perdida que hemos tenido como provincia con la actividad minera. Como muchos de ustedes saben, la minería es una fuente importante de ingresos y empleo para otras provincias argentinas, como San Juan y Santa Cruz. Sin embargo, en Chubut, la actividad minera ha sido prohibida desde el año 2003. Nuestra última experiencia tratando la ley minera condujo a un desastre político y social. con quema de edificios públicos, sospechosamente elegidos por algunos grupos que operaron en forma organizada. No hubo discusión, no hubo diálogo, sólo fuego y violencia. Y esa nunca es la manera.
Lo más lamentable, es que nadie fue preso, por lo cual tampoco hubo justicia. Luego de este aberrante suceso en nuestra historia (en el que se quemó hasta derrumbarse la Casa de Gobierno de la provincia), no se presentaron más proyectos productivos para Chubut. Simplemente, se olvidaron.
Los habitantes de la meseta, que durante muchos años vivieron esperando una oportunidad para mejorar sus vidas, decidieron hacer las valijas e irse. Sucede algo muy triste cuando uno conoce a un adolescente en Gastre, porque la pregunta no es “Qué vas a hacer de tu vida”,sino “A dónde vas a hacer”.¿Se entiende? Nos arrebataron el futuro, nos dejaron sin nada y ahora están pensando en elecciones y formando nuevas alianzas.
Entiendo que hubo preocupaciones legítimas acerca de los impactos ambientales y sociales de la actividad minera. Pero creo que, con los avances tecnológicos y las prácticas responsables que se están llevando a cabo en otros lugares del mundo, podemos tener la seguridad de que la minería puede ser desarrollada de manera responsable y sostenible.
La prohibición de la minería ha tenido un impacto negativo en nuestra economía, y ha limitado las oportunidades para nuestros ciudadanos. En lugar de depender de una sola industria, debemos buscar diversificar nuestra economía y fomentar el crecimiento de otras industrias que puedan brindar oportunidades de trabajo a largo plazo.
Ahora nos toca leer por los diarios el “boom” del litio que se avecina en el norte de nuestro país. Allí no hay anti mineros quemando edificios, pero sí hay turismo mundial, hay naturaleza y hay esperanza de trabajo. Porque cuando hay industria, el crecimiento es para todos. ¿O acaso alguien cree Chubut tiene la infraestructura para explotar el turismo a nivel mundial?
Ni siquiera nuestras rutas están en condiciones. La minería genera trabajo y oportunidades, y los chubutenses una vez más la vimos pasar. En resumen, creo que como provincia, debemos ser más abiertos a considerar todas las opciones disponibles para fomentar el crecimiento económico y la creación de empleo. Debemos aprender de las lecciones de la minería y asegurarnos de que cualquier nueva industria que desarrollemos sea sostenible y responsable. Si podemos hacerlo, creo que podemos garantizar un futuro próspero para los ciudadanos de Chubut.
(*) Presidente de la Comuna Rural de Gastre, Chubut
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