ARGENTINA | 21 de Noviembre de 2024
ARGENTINA
21 de Noviembre de 2024
PORTADA
CATAMARCA

La deuda política en Catamarca

El gobierno de esta provincia no quiere asumir su rol de contralor en la organización de la comunidad.

Desde hace más de diez años que no ha sabido cómo manejar la situación que se plantea en la zona de Andalgalá y vuelve a cometer los mismos errores del pasado. Eso se observa claramente cuando intenta justificar que son “foráneos” los que impulsan hechos de violencia y no sabe cómo poner punto final a la inutilidad del Estado para resolver la conflictividad social que tiene atrapada a la minería.

En la actualidad, Raúl Jalil, se asume como un relator de esta situación y no profundiza, o no quiere, “meter mano” y que el Estado acomode la situación.

No es función de la empresa minera, los gremios o las entidades sociales “ordenar” la convivencia. Los poderes Legislativo, Judicial y Ejecutivo deben ser los responsables en comandar y coordinar la armonía social. La misma que está alterada y que nadie asegura como podrá seguir si no se toman medidas para corregir la tentación de seguir hacia un verdadero caos.

Nadie se olvida de los sucesos del pasado. No se puede ignorar quejas y violencias, ya sean de origen local o externa. Como así también, olvidarse que hubo delitos pendientes de juzgamiento de provocadores y funcionarios que nunca rindieron cuenta de qué hicieron con los dineros del erario público.

Esto no es de ahora, tiene su arrastre. Ahora vemos como muchos se rasgan las vestiduras y se golpean el pecho… son los mismos que estuvieron antes en la gestión pública y no resolvieron nada, la dejaron pasar.

Ahora con el resurgir de las inversiones y la llegada de capitales genuinos para generar trabajo, reaparecen “los impide” todo que nunca faltan y los inescrupulosos políticos que sólo piensan en sus ganancias de politiquería y jamás lo hacen en el bien público del excelente y necesario tiempo para producir.

Jalil, debería dejar de ofrecer enunciados conmovedores y ponerse firme para hacer una consistente política de Estado, para lo cual logre poner “la casa en orden”. Por tal motivo, que exista menos preocupación para saber quienes prestan servicios en la industria y más decisión y “coraje” (por no decir improperios), para viabilizar la producción y el empleo en Catamarca. En síntesis, gobiernen.

Claudio Gutiérrez

VOLVER A LA PORTADA